Predictores de reoclusión precoz y resistencia a la recanalización en el tratamiento trombolítico endovenoso del ictus isquémico. Rubiera del Fueyo, Marta A., UAB 2006

El ictus isquémico es uno de los problemas más acuciantes de la sociedad actual. Él único tratamiento aprobado en la actualidad para el ictus agudo en el tratamiento trombolítico endovenoso, que sólo consigue una buena respuesta funcional en el 50% de los casos. Dos de las limitaciones fundamentales del tratamiento trombolítico son la reoclusión arterial y la falta de recanalización. La ultrasonografía carotídea y transcraneal es una técnica no invasiva, realizada a la cabecera del enfermo, que nos permite el diagnóstico etiológico precoz y la evaluación del estado vascular en tiempo real. En los trabajos que conforman esta Tesis Doctoral intentamos averiguar los predictores de reoclusión precoz y de ausencia de recanalización, y su impacto en el tratamiento fibrinolítico.

La reoclusión arterial ocurre en un 17% de los pacientes tratados con rt-PA endovenoso, y conlleva una mala evolución clínica precoz y un pobre pronóstico funcional. La gravedad inicial del ictus (NIHSS>16 puntos) y la presencia de una oclusión en tandem carótida/media predicen de forma independiente la aparición de reoclusión.

Por otra parte, la oclusión en tandem carótida/media (oTCM: estenosis grave u oclusión de la arteria carótida interna extracraneal y oclusión aguda de la arteria cerebral media ipsilateral) se identifica en aproximadamente un 20% de los pacientes tratados con rtPA e.v. Conlleva un menor porcentaje de recanalización arterial y una peor evolución clínica a corto y largo plazo que la de los pacientes con oclusión aislada de la arteria cerebral media. Sin embargo, la localización de la oclusión intracraneal influye en el impacto de la oclusión en tandem: en oclusiones proximales, la presencia de oTCM predice de forma independiente la falta de recanalización arterial, mientras que en oclusiones distales el único predictor de falta de recanalización arterial la hiperglucemia al ingreso (Glc>140 mg/dl).

Así pues, la realización de un estudio ultrasonográfico completo carotídeo y transcraneal en la fase aguda del ictus permite detectar de forma precoz los pacientes con mayor probabilidad de falta de recanalización y/o reoclusión, que se podrían beneficiar de terapias de reperfusión más agresivas.