Esta es la pregunta que se plantean la Dra. Patricia Martínez-Sánchez y sus colaboradores del Hospital La Paz en un artículo de reciente publicación en la revista Neurology.
Para responderla compararon el efecto del “pretratamiento” con estatinas a dosis elevadas o bajas/moderadas sobre la severidad de los ictus admitidos en su Unidad entre los años 2008 y 2010.
El tratamiento previo con estatinas se demostró asociado con una menor severidad de los ictus al ingreso tanto con dosis altas como con dosis bajas/moderadas, sin diferencia estadísticamente significativa entre ambas.
Aunque el efecto del tratamiento previo con estatinas sobre el pronóstico funcional y la supervivencia tras el ictus ha sido explorado por otros autores con anterioridad, los datos disponibles hasta el momento sobre el efecto sobre la severidad del ictus eran escasos.
ABR